Resolución de dilema.

Un chico quería casarse con la hija de un bruto, pero este no quería, y de tanto insistir el chico, el bruto le ofreció solucionarlo con un juego.

Estaban los dos en un camino de grava, de piedrecitas claras y otras oscuras. El bruto sacó una bolsa pequeña de tela y le dijo al chico que iba a meter dentro una piedrecita oscura y una clara, y que si sacaba la clara le dejaba casarse con su hija, pero si sacaba una oscura le cortaba los webs.

El bruto, que además era un cabrón, cogió del suelo una piedrecita oscura y la metió en la bolsa, luego cogió una clara e hizo ademán de meterla en la bolsa, pero metió disimuladamente otra oscura.

De esta maniobra se percató el chico, pero no se atrevió a decir nada. Total, que las dos piedrecitas de la bolsa eran oscuras. Tres meses mas tarde el chico se casó con la hija del bruto.

¿Como salió el chico del atolladero?.

Una opción sería sacar las dos piedras y así demostrar que había hecho trampa;
pero como sólo puede sacar una,... la dejaría caer al suelo y así se confundiría con
las demás;  ¡huy! que torpe, se me ha caído...… bueno, saque usted la que queda
en la bolsa y así sabremos el color de la otra.

Bohemio escribió:

Una opción sería sacar las dos piedras y así demostrar que había hecho trampa;
pero como sólo puede sacar una,... la dejaría caer al suelo y así se confundiría con
las demás;  ¡huy! que torpe, se me ha caído...… bueno, saque usted la que queda
en la bolsa y así sabremos el color de la otra.

Joer, que poco duró el juego.

Qué suegrito ehhhh....