La lámina presentaba una leve grieta que al meterla entre los rodillos y acuñar se ensanchó, se rajó. Pasó desapercibida a los operarios esa pequeña grieta de la lámina. Si os fijáis en el busto se ve como coinciden las partes.
Os dejo un dato para los que coleccionáis este tipo de monedas. El otro día, leyendo a Voltes, di con un dato que os resultará llamativo y curioso. En los años 60 del siglo XVII, el 95% de las monedas circulantes en Castilla eran de cobre.
Un saludo.
"Todos los que con la espada, con la pluma, con la palabra agravan y perpetúan los males de la Nación son españoles". Amadeo I, mensaje de renuncia al Trono. Febrero de 1873.