Cosas curiosas de Subastas.

¿A nadie le a sorprendido que tras la subasta del 30 de noviembre de Aureo, algo polémica en cuanto a los precios y con el ambiente de extranjeros al teléfono que había presentes comprando piezas para otro país, 15 días después exista una caída del rublo ruso descomunal?
Llamarme Iker Jiménez, pero la técnica de salvar el capital con bienes tangibles y que luego puedes vender en otro país y con otra moneda, ya es muy conocida.
¿Creéis que es descabellado?

Creo que tienes razón y no vas muy desencaminado, ya se sabe el refrán, cuando las barbas de tu vecino........ Lo malo es que quizás con tantas pujas se revalorice piezas muy por encima de su valor y a la hora de vender no se alcance el precio de vendida, pero bueno siempre habrá un comprador con mas perras. Saludos.

Siempre cabe la posibilidad de que a alguien aficionado le toca la Primitiva y decide darse un homenaje en la siguiente subasta.

Sin embargo, lo de Aureo, sus piques y adjudicaciones muy por encima de lo normal deja el terreno de la numismática y entra en el terreno de la psiquiatría. Allá cada uno con como funde SU dinero, pero desde luego no se explica como inversión de futuro.

Esta claro que hay mas dinero fuera que aquí,de todas formas solo hay que asistir a una subasta en sala,para darse cuenta de lo que se cuece, la última vez que asistí,fue en diciembre del año pasado y los miles de euros subían sin parar en la subasta de oro macuquino,extranjeros con su asesor,muchos al telf. hablando en ingles con sus clientes esperando la orden de pujar mas o no pujar,o en la Imagines Imperatorum,que fue una locura,con comerciantes y representantes de las mejores firmas,Ars Classica,D.F Grotjohann,etc,al ver el perfil de los asistentes te das cuenta que estamos en 2ªb o 3ª,la Champions esta inalcanzable.


Os paso este pequeño enlace del blog monedas antiguas:



Philip Grierson (uno de los numismáticos mas importantes del s.xx) sobre el mercado numismático y las monedas antiguas como inversión realiza un breve análisis sobre la realidad del mercado numismático:

El coleccionismo de moneda siempre ha sido popular, y en los últimos años, en parte como resultado de la hábil publicidad de los distribuidores, en parte como consecuencia de una mayor riqueza general y, tal vez, de mayores oportunidades educativas, el número de coleccionistas ha aumentado considerablemente. Esta rápida expansión ha tenido consecuencias secundarias que están lejos de ser felices: un aumento espectacular de los precios de la moneda, un aumento en la proporción de los coleccionistas interesados ​​en las monedas principalmente como inversión, la invasión del mercado por los bancos por razones puramente financieras. Esto último es particularmente desafortunado, ya que los bancos siempre pueden superar la oferta de los compradores privados y muchos de ellos consideran sus adquisiciones simplemente como una cobertura contra la inflación, no pueden o no quieren proporcionar a los investigadores con información acerca de las monedas en su poder o con facilidades para su estudio. Es sólo en casos excepcionales que ponen sus tesoros a la vista del público, como ha hecho el Chase Manhattan Bank en Nueva York. Los inversionistas privados también hacen la vida más difícil para aquellos que coleccionan por estudio o por placer, y es un pequeño consuelo saber que sus actividades no siempre son tan rentables como ellos piensan. Los cambios de precios no afectan a todas las series de monedas por igual ni operan de manera uniforme en todos los niveles, y las rarezas de alto precio de una generación pueden estar completamente fuera de moda una o dos décadas más tarde. Los bancos y los inversores numismáticos, sin embargo, no son más que una minoría, incluso si la alteración que crean en el mercado de monedas está fuera de proporción a su número. La mayoría de los que coleccionan lo hacen porque tienen un interés genuino en las monedas, y porque desean adquirirlas en parte por el placer de poseerlas, en parte porque al manejarlas sienten que están en contacto directo con tiempos distintos de los suyos. (Ph. Grierson, Numismatics, Oxford, Oxford University Press, 1975, pp. 182-183)

Al leer esto pensé que podía aplicarse perfectamente a la situación actual y, sin embargo, ¡fue redactado hace 37 años!

Interesante texto Ventisca. Gracias por compartirlo. En los tiempos de incertidumbre en los mercados financieros siempre aumenta de manera significativa la compra de bienes, como obras de arte, colecciones numismaticas, filatelia, oro, etc, como modo de ahorro.

..."La mayoría de los que coleccionan lo hacen porque tienen un interés genuino en las monedas, y porque desean adquirirlas en parte por el placer de poseerlas, en parte porque al manejarlas sienten que están en contacto directo con tiempos distintos de los suyos."
Totalmente de acuerdo, así me siento yo. Y por poder tocarlas, aborrezco el sistema de encapsulado hermético, tan americano y tan de moda.
Un saludo

Corvera escribió:

..."La mayoría de los que coleccionan lo hacen porque tienen un interés genuino en las monedas, y porque desean adquirirlas en parte por el placer de poseerlas, en parte porque al manejarlas sienten que están en contacto directo con tiempos distintos de los suyos."
Totalmente de acuerdo, así me siento yo. Y por poder tocarlas, aborrezco el sistema de encapsulado hermético, tan americano y tan de moda.
Un saludo

De acuerdo contigo. A me encanta poderla tener entre los dedos y mirarla con la lupa. Tocar la plata y el oro y su historia , para mi, tiene algo especial.

Creo que la satisfacción que podemos alcanzar cualquiera de nosotros con un modesto antoniniano por una afición, siempre será superior a la de cualquiera de los que pujan sin despeinarse por un aureo de Nerón por mera especulación. Aunque juguemos en otra categoría, ésto no deber ser un impedimento para que podamos seguir disfrutando de nuestra afición. Éstos nunca lo podrá decir un inversor por muy cara que sean sus adquisiciones.

A mí no me parece raro bilbaíno, si fuera en otra casa sí, en Áureo no.

Vete acostumbrándote a que va a haber subastas en las que AUN PUJANDO FUERTE ni vas a oler las piezas a las que tires. Y te lo digo porque lo he sufrido varias veces en mis carnes con unos remates disparatados.

No fue nada fuera de lo normal lo vivido.

Corvera escribió:

..."La mayoría de los que coleccionan lo hacen porque tienen un interés genuino en las monedas, y porque desean adquirirlas en parte por el placer de poseerlas, en parte porque al manejarlas sienten que están en contacto directo con tiempos distintos de los suyos."
Totalmente de acuerdo, así me siento yo. Y por poder tocarlas, aborrezco el sistema de encapsulado hermético, tan americano y tan de moda.
Un saludo

Yo se que en estas ultimas subastas me llevado cerca de 70 o 80 lotes de los que nunca me suelo llevar uno solo.

Yo he pensado que quizas en estas fechas de navidad no habia tanto dinero para gastar, la gente se ha contenido mas y por eso me ha caido a mi casi todo.

Por suerte varios amigos se han llevado bastantes cosillas que les han gustado si no me juntaba con pagar yo solo unos 5000 euros, cuando normalmente apenas llego a pasar nunca los 300 o 400, en la ultima de soler vi muchos lotes sin vender en la repesca, yo creo que de verdad han influido las fechas.

La crisis económica (la social, la de valores, la... van por otro lado ) afecta a todos los ámbitos vitales (me estoy enrollando) por lo que es normal que se venda menos de todo, incluyendo monedas.

Lo de los rusos, Aureo y el rublo del principio del hilo no creo que sea así. Las monedas de colección no son un buen refugio financiero.

Creo que las próximas subastas van a estar muy flojitas en cuanto a precios / adjudicaciones...Me lo dice mi bolita de cristal

Yo sigo al día todas las subastas nacionales y parte de las internacionales vía Sixbid, y veo que el mercado se mueve muchas veces por razones psicológicas antes que digámoslas "inversionistas".

El único elemento que veo claramente como inversión son las monedas de muy alta calidad, cuanto más antigua mejor, y que sean griegas y romanas. Hay si que veo que se aplica lo que comenta Ventisca y Grierson. Adjudicaciones en miles o decenas de miles de euros/dólares/francos suizos.

Pero si vamos a macuquinas, reales de a ocho y numerario de Puerto Rico o Filipinas últimamente se están yendo de madre. ¿Por qué? A mí me da la sensación que el coleccionista norteamericano, aburrido o ahíto de Eagles y Dimes de plata, está ampliando su colección a piezas que piensa son parte de su historia. No es inversión, es la psicología de que quieres que tu colección represente la historia de tu país.

En las últimamente famosísimas subastas de Aureo, ves adjudicaciones asombrosas. Piezas que encontrarás en otras casas de subastas nacionales se adjudican en esta subasta mucho más caras. ¿Por qué? Yo no lo sé. Puede ser que haya compradores internacionales que sólo conozcan esta subasta, y desconozcan al resto de casas. Puede que haya un mejor trato al cliente internacional que el resto de las casas. Puede que algún ruso o "andorrano" que ve como blanquear dinero oscurillo. Quién sabe. En mi trato con ellos no les encuentro ni mejor ni peor vendedor que Cayon, Soler, Herrero, Ibercoin o Jesús Vico. Pero si puedo dar testimonio que en la subasta los piques son frecuentes, con lo que el comprador final se adjudica la moneda a un precio demasiado alto para considerarlo de alguna forma como inversión. Pero el gustazo de haberle quitado el lote 300 al que antes te birló el lote 290, eso no tiene nombre.

Me quedo con el pensamiento final de Castellano o Moneditis. Quien no ha entrado en el juego de los piques de subastas ha pillado muy buenos precios en la última de Soler.

De hecho, todavía estais a tiempo de que los Reyes os traigan algo (más) ...