¡Saludos a tod@s!
Voy a mostraros la semiuncia con la cual competí en el concurso de presentaciones de monedas de este foro que finalizó precisamente la semana pasada, así que es probable que muchos ya la hayais visto.
La subo de nuevo para que ya se quede en la sección que le corresponde y no acabe perdida en un hilo que con el tiempo poca gente mirará. Sólo he añadido una foto nueva en que sale un Aes Grave como ejemplo de una explicación y no la incluí en el concurso porqué se comentó que sólo podía aparecer la foto de la moneda con la que se competía.
Hará algunos meses decidí no sólo centrarme en los denarios republicanos y pensé en tener como mínimo una representación de las diferentes monedas que se acuñaron durante esa época. Así no sólo será la colección de un tipo de moneda en concreto, y englobará de este modo a toda una época entera, lo cual me pareció algo más interesante. Espero que os guste.
Gens: Anónima
Valor: Semiuncia
Módulo: 18mm
Peso: 5,07g (sistema semilibral)
Metal: Bronce
Año: 217-215 a.C.
Ceca: Roma
Ref.: Craw.38/7, Syd.87, Gr.Roma.129, McCabe AA
Anverso: Busto de Mercurio a derecha con petasos alado y anudado por detrás (el petasos fue un sombrero redondo originario de Tesalia para protegerse del sol). Gráfila de perlas.
Reverso: Proa de nave a derecha. Encima leyenda "ROMA". Gráfila lineal.

El motivo de la proa en el reverso de las acuñaciones de bronce prácticamente permaneció inalterado durante toda la etapa republicana. Este tipo, sin ser arcaico, lo encontramos por primera vez en el reverso de Aes grave durante la segunda mitad del siglo IV a.C., época en la cual Roma aún no disponía de una gran flota ni de ningún dominio militar marino, por lo cual este motivo no gozó de popularidad en aquel entonces cayendo en desuso.

Esto cambió radicalmente en el 260 a.C. cuando los romanos derrotaron a los cartagineses (la gran potencia naval de aquella época) en su primera gran batalla naval, la batalla de Mylae, repitiendo la victoria al año siguiente en aguas de Cerdeña. Esto marcó un punto de inflexión en que los romanos, contra todo pronóstico, podían concebir la esperanza de obtener la supremacía en el mar y concentraron un gran esfuerzo en la creación de una marina de guerra capaz de competir con la de Cartago, dando sus frutos en la batalla del cabo Ecnomo en Sicilia en el 256 a.C., considerada la batalla naval más grande de la historia en cuanto a efectivos desplegados, involucrando a más de 650 naves y 290.000 tripulantes e infantes de marina entre los dos bandos (unos números exagerados seguramente por Polibio, pero que la mayoría de historiadores actuales consideran cercanos a la realidad). Roma derrotó de forma decisiva a la flota púnica, que perdió la iniciativa hasta el final de la contienda.
Es a partir de aquella época en que la proa de nave quedó unida al reverso de todas las emisiones de bronce, iniciándose en la serie RRC35 (Crawford) de Aes grave en adelante, perpetuando así el recuerdo de este acontecimiento transcendental para los romanos y como vehículo propagandístico de cara a las demás potencias mediterráneas haciendo gala de su nueva hegemonía naval.
La serie de la cual forma parte la semiuncia de este artículo se basa en el sistema semilibral donde un As pesa seis uncias. Durante la segunda guerra púnica el estrés financiero que sufrió Roma comportó una serie de reducciones drásticas en el estándar de los pesos de las emisiones de bronce. En sólo seis años, entre el 217 a.C. y el 211 a.C., se pasó de un sistema semilibral, cuyos ases pesaban seis uncias, al sistema sextanal con ases de sólo dos uncias de peso.
El tipo elegido para el anverso de las semiuncias fue el busto de Mercurio, el mismo tipo que aparecía en los sextans. La diferencia se encuentra en que a diferencia del sextans, en cuyo campo se muestra la marca de valor de dos uncias "OO", en la semiuncia no encontramos ninguna marca de valor ni en anverso ni en reverso. En las acuñaciones tempranas encontramos la letra sigma griega como marca de valor, desapareciendo posteriormente y siendo junto a la quartuncia las únicas monedas de bronce sin marca propia.
Esta semiuncia pertenece al grupo "McCabe AA", equivalente al grupo RRC38 de Crawford. El peso estándar de esta emisión se basa en un As de 132 gramos. La proa del reverso muestra unos detalles bien elaborados, incluyendo una plataforma de combate elevada con un bastón representado en su interior y unas olas bajo la quilla.
Se observan varios estilos diferentes en los grabados y también variaciones en la preparación de los flanes. Las monedas de esta emisión son de fácil clasificación atendiendo únicamente a su peso ya que éste no se solapa ni se confunde con ninguna otra emisión posterior. La producción del quadrans, el triens, el semis y el As de esta emisión se hace por fundición, siendo el resto de monedas de la serie (quartuncia, semiuncia, uncia y sextans) fabricadas por acuñación.
En esta serie de bronces de sistema semilibral se observa una curiosa estructura sobre la plataforma de combate de la proa. Este objeto tiene hacia la parte trasera una estructura en forma de U invertida o de alfiler. El instrumento, iconográficamente único, está representado en casi todos los bronces de proa de la República de los siglos III y II a.C.
Este objeto apenas ha sido considerado antes por los estudiosos, sin embargo es importante, desde un punto de vista técnico y numismático porqué también ayuda a definir el término "post quem" de las primeras monedas emitidas con el tipo de la proa. Esta representación sólo se encuentra en las monedas romanas y no se observa en ningún otro regimen antiguo, dando a entender que era una estructura que estaba en uso sólo entre los romanos. El hecho de que con el paso del tiempo este objeto desapareciera sugiere que sólo se deben considerar las representaciones más antiguas y precisas para decidir qué objeto es.
Partiendo de que este objeto se sitúa sobre la plataforma de combate, se puede suponer que, o bien tuvo que ser retirado durante la batalla para dar paso a los soldados, y por tanto ser un objeto útil para la navegación, o bien tuvo que ser un instrumento necesario en la batalla, es decir, un arma. Es demasiado grande como para representar un cabestante o un ancla.
El italiano Antonio Morello realiza un ensayo sobre este tema en su libro "PRORAE", llegando a la conclusión de que se trata de la representación del famoso "corvus" descrito por Polibio. Según dice, la emisión de Aes grave del 260 a.C. que conmemoraba la victoria naval sobre Cartago en Mylae (grupo RRC35 de Crawford), es donde se muestra por primera vez la proa con esta estructura y por lo tanto deben de ser las representaciones más fidedignas de este ingenio de guerra. Esta imagen fue tergiversándose en emisiones posteriores respecto a su primera aparición hasta convertirse en una simple esquematización, seguramente debido a que el "corvus" era ya un elemento desconocido para las siguientes generaciones de grabadores.

Polibio explica en su obra que Roma ideó una pasarela de diez metros de largo con barandillas a sus lados hasta la altura de la rodilla, con un espolón de hierro en su extremo y que podía rotar sobre un eje para facilitar el abordaje de las naves enemigas por parte de sus soldados. De esta forma se compensaba la superioridad técnica de las naves púnicas y la pericia naval de sus oficiales y marineros, ya que Roma podría hacer uso de su infantería, muy superior a la cartaginesa.
El peso y tamaño del corvus serían muy incómodos para la navegación, aumentando la inestabilidad de la nave y restándole maniobrabilidad, hechos por los que seguramente dejó de utilizarse ya que no volvemos a tener noticias suyas a partir de lo referido por Polibio, quedando sólo su recuerdo representado en las emisiones de bronce.
Un saludo.